En los últimos tiempos hemos encontrado noticias contra los retoque s en Photoshop, en concreto con alguna portada de revista. Yo más bien pienso que esto son estrategias de marketing para promocionar a la famosa/o de turno y al mismo tiempo resultar politicamente correcto. Todo en su justa medida puede resultar beneficioso, siempre evitando los excesos o ese «piélago de maldades» como los calificaba San Agustín.

El maquillaje no deja de ser un arreglo para mejorar, o quizás una especie de Photoshop analógico (al igual que corsets, tacones, alzas, postizos…) y nadie lo pone en duda. Al igual que en el digital los excesos pueden manipular la realidad hasta alterar el valor y concepto de las cosas. Aquí podemos ver un ejemplo con la campaña Todos podemos ser hermosos de Shiseido y sus «retoques» con la que ha revolucionado Japón llegando en unos días a más de 6 millones de visitas en Youtube. Valorad vosotros el resultado final.